Yo quiero ser trascendente
Últimamente me cuesta mucho escribir en este blog. No porque no se me ocurran cosas (bueno, a veces es por eso), sino que porque me cuestiono permanentemente el concepto de blog en sí…
Será mi de-formación periodística, la que rezonga con voz gruñona que lo que uno escribe debe tener una especie de utilidad social, porque somos algo así como los redentores de los pobres desinformados.
Será Parrales, el que me tiene sufriendo con el teclado hasta las 6 de la mañana mientras escucho su voz cavernosa que repite “cada palabra debe estar ahí por algo, aportando algo”… básicamente la idea es que si no se escribe así, tu novela apesta.
Será mi manía de cuestionarme todo.
La cosa es que yo estoy entera enredada y ya no sé.
Si me pongo a hablar de los desastres que pasan en el mundo, siento que me las estoy dando de comentarista frustrada, y que para eso la gente puede agarrar el diario e informarse de lo que les interesa saber.
Si me da por compartir algo que he escrito para clases, un relato que me surgió con una imagen, un cuento o lo que sea, me parece que estoy dando la lata, que el que quiere leer literatura va y se lee un libro, que para eso hay una lista enorme de personas que escriben increíble (es lo malo de leer tanto, ya no te liberas de la autocrítica lapidaria… y en algunas ocasiones, de la necesidad de que los demás te digan que te quedó muy bonito, para que vamos a andar con cosas).
Si me pongo a hablar de los pequeños asuntos de mi vida cotidiana siento que eso no le interesa más que a unos pocos, lo amigos que me conocen, y que ya para eso les escribo mails y los llamo. Que en realidad no tiene nada de emocionante saber cuántas veces quise estrangular a un cliente o descuadré la caja esta semana.
Así está el asunto.
Pero me voy a hacer la loca…
Supongo que después de todo, para eso uno tiene un blog, para darle con lo que se le ocurra, con lo que se le atragante, desde lo más nimio a lo más trascendente (que increíble la cantidad de veces que uno de cruza con esa palabrita durante la época de estudiante de lo que sea relacionado con humanidades… lo sé yo, que he tenido ramos de periodismo, literatura, filosofía, sicología y otras ías… incluyendo teología, jeje).
Y otro detallito: cuando a mi me aburre un blog, pues no lo leo más. Es así de fácil.
Y nadie sufre.
No hay dolor.
posted by Vero at 4:47 p. m.
12 Comments:
Bueno, yo no le creo mucho al blog. Pero es interesante... por ejemplo escribirte a ti que escribes tan bien o otros. Pero el blog en sí... yo ni leo mi blog, leo los comments cuando alguien se anima, eso no puede ser malo. Fome a veces pero no se. Me gusta leerte como a otro puñado de gentes, cada vez menos, cada vez mas apretado, me estoy volviendo atrabiliario
Bueno, yo no le creo mucho al blog. Pero es interesante... por ejemplo escribirte a ti que escribes tan bien U otros. Pero el blog en sí... yo ni leo mi blog, leo los comments cuando alguien se anima, eso no puede ser malo. Fome a veces pero no se. Me gusta leerte como a otro puñado de gentes, cada vez menos, cada vez mas apretado, me estoy volviendo atrabiliario
Pues así de simple, tú lo has dicho, si no gusta no se lee, y punto.
Pero haz caso a tu conclusión, un blog es para que uno escriba lo que sale del... (ufff... me vuelvo catalana) y a veces no hay que cuestionarselo tanto. A mí también me pasa eso, la deformación profesional es una atentado a la inocencia.
Obviémosla.
Un beso
mi niña, yo creo que como toda cosa nueva, los blogs no tienen mucho fundamento de ser, pero son. Y se multiplican. Y generan nuevos círculos sociales. Y a la gente le gustan. Como la mayoría de las cosas en la vida, nacen por una necesidad que estaban ahí, y por lo demás son bastante cómodos, por lo mismo que tu dices.
Así que bien no más.
Sabias que Tolstoy casi no termino de escribir Anna Karenina porque estaba preocupado cuestionandose el valor del arte? Es decir, pensaba que el arte no valia la pena. True story.
Yp quiero trascender pero para dentro. Trascender de mi dependencia al resto.
Con blog o sin blog... escribimos para salvarnos... Para redimirnos del tedio, de la culpa, la vergüenza, para decirnos cosas y seguirnos cuestionando porque tenemos la vaga intuición de que esta es nuestra forma más personal de relacionarnos con el mundo... No arreglamos el mundo, pero quizás ponemos ese granito de arena en esa playa lejana de alguien que mira el horizonte...
Hace poco que tengo Blog y ha sido placentero ir descubriendo gente y recibir comentarios enriquecedores... así se rompe un poco el cerco de la soledad... aunque esencialmente estamos solos y escribimos para nada... (mentira piadosa)
abrazoceánico!!!
Si te sirve de algo para mi es importante que escribas en tu blog, así me entero de lo que pasa en tu vida cotidiana, es casi como tener una de esas conversaciones de pasillo de la universidad, donde al vernos todos los días no siempre hablábamos de cosas vitales para la humanidad, pero nos servían para seguir armando nuestra amitad. Extraño esas conversaciones absurdas tanto como extraño las trascendentales. De hecho, es por esas conversaciones cotidianas con las que nos vamos conociendo que podemos ser amigas como lo somos hoy. Como parte de la sociedad te pido por favor que sigas escribiendo.
no pensaba dejar de hacerlo, queridísima parte de la sociedad...
:)
Alguna vez comenté que tomo los blogs personalmente como una especie de terapia, pero creo que son mucho más que eso. Y sobre todo para los periodistas, son la oportunidad de tener un medio independiente, aunque sea pequeño, con el relato fresco y la noticia viva, si corresponde, pero sin los filtros de los editores. A menos que ya seas editor(a) de algún medio independiente, pero aún así estarías sujeto(a) a las políticas propias del laburo. No sé, creo yo.
Tu no más imagina Vero, dónde más van a buscar los historiadores Gxodzolianos testimonios fidedignos cómo era la vida humana en el planeta Tierra a principios del siglo XXXXIV?
En nuestros blogs, poh Vero!
(No confundir con los historiadores Dzongoxlianos, que esos son unos buenos para nada)
Me dicen que cuando es fácil no es divertido, me dicen que demasida dificultad aburre, mejor no quiero nada.
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